miércoles, 25 de marzo de 2009

[Trasfondo: Dragonlance] Dhariil Rashas

Este es uno de mis últimos personajes, creado para la partida Crónicas de las Tierras del Dragón, una versión alternativa de la Guerra de la Lanza de Dragonlance, mi personaje es un elfo qualinesti, hijo del senador Rashas que en un futuro será clérigo de Majere. Escribí el trasfondo en forma de carta.


DHARIIL RASHAS



Antes del exilio

Carta de Dhariil Rashas a su hermana Dharashana

Querida hermana:
Es difícil definirse uno mismo cuando sólo eres la mitad. Es algo que la mayoría de la gente no comprende, porque nacen muy pocos gemelos entre nuestro pueblo y a nosotros siempre nos han mirado como una excepción, pero nosotros descendemos de Kith-Kanan, él sabía también lo que era un hermano gemelo y supo afrontar una separación. Es parte de nuestra herencia.

Nuestro padre siempre ha presumido de esa herencia con orgullo, yo en cambio la veo como algo lejano que no tiene mucho que ver con nosotros, aunque de esa herencias nos viene el cabello y las manos de dedos largos. Compartimos los mismos rasgos, la misma piel. Hasta ahora siempre has estado a mi lado pero ha llegado el momento en que nos separemos. No lamento que contraigas matrimonio con el capitán Palthainon, sólo siento que nos alejamos y que voy a estar solo por primera vez. Tengo que aprender a ser uno y no sé cómo hacerlo.

A nuestro alrededor todo cambia a pasos agigantados. Los rumores de guerra que hemos oído durante años se han convertido en certeza y ya es cosa nuestra y no de los humanos. Tengo la sensación de que todo se desarrolla demasiado rápido y no tenemos tiempo para pensar y decidir. Sabes que me gusta tomarme las cosas con calma y sé que ahora te estarás riendo porque sabes que no puedo hacerlo.

Te casas esta noche, y leerás la carta por la mañana, cuando yo ya haya partido para el exilio. ¿Quién sabe cuándo podré escribirte otra vez? Espero que las cosas salgan bien y que no corras peligros cuando luches junto a tu esposo y nuestro Orador para cubrir nuestra retirada mientras el pueblo marcha al exilio. Cuando nos despedimos esta mañana me miraste con tristeza y supe que tenías miedo aunque tu voz me hablaba animada de vivir aventuras escondida en los bosques que tanto amamos. Yo también tengo miedo aunque mi parte es más fácil. Nunca he sabido si quiero vivir aventuras, tú eras la que decidía siempre y tiraba de mí. ¿Qué va a ser ahora de los dos, el uno sin el otro? ¿Quién sabrá en qué estoy pensando sólo con mirarme?

Si las cosas hubieran sido como deberían habrías esperado todavía diez o quince años antes de casarte, quizás para ese entonces nuestro padre habría elegido una buena esposa también para mi, tú hubieras tenido una casa junto a la nuestra y yo hubiera jugado con tus hijos y tú con los míos. Pero las cosas ya no serán así. Las tradiciones se han roto y el futuro es ahora incierto. Yo parto para el exilio esta noche y tú te quedas. Podría quedarme yo también. Lo he pensado. Pero no hay motivos para ello. Se quedan los más diestros con el arco, como tú, y yo nunca lo he sido. ¿Recuerdas cuando durante las lecciones yo estaba más atento a cómo lo hacían mis compañeros que a hacerlo bien yo? Parecía suficiente con que tú lo hicieras bien. Creo que en la reunión de esta tarde todos esperaban que me ofreciera voluntario para quedarme y yo mismo sé que puedo disparar un arco cuando es necesario, pero no soy el mejor arquero de Qualinesti y ahora sólo deben quedarse los mejores.

Tú lo sabías. Tú eras la única que no esperaba que lo hiciera.

En la reunión me fijé en las miradas de todos. La de Porthios parecía estar llamándome cobarde. No lo soy. Simplemente hay cosas que otros hacen mejor que yo. Si todo nuestro pueblo nos hubiéramos quedado en Qualinesti habría luchado, pero nos vamos y es necesaria también gente que ayude al pueblo en el exilio, que vaya a Silvanesti a pedir ayuda a nuestros primos, que se ocupe de mantener las tradiciones de nuestro pueblo en estos tiempos difíciles. Quedarse y ser un héroe es fácil, ahí no tienes que pensar. Alimentar la esperanza de un pueblo exiliado es un reto mayor para mí. Y sé que eso sí puedo hacerlo. Somos hijos de un senador del Thalas-Enthia, esa herencia pesa para mí más que la de lejanos antepasados.

Sé que no tengo que justificarme ante ti, quizás en realidad solo estoy justificándome ante mí mismo. Me siento inquieto ante lo desconocido. Es la primera vez que salgo de Qualinesti y aunque nuestros primos kalanestis nos han prometido ayuda, no sabemos realmente qué nos encontraremos en Ergoth.

Cuando éramos niños y tú corrías de un lado a otro a mí me gustaba quedarme sentado en medio de la gente, observar parecidos y diferencias. ¿Recuerdas cuando el enano Flint Fireforge se instaló en Qualinost? Nos escondíamos para observarlo desde lejos, fascinados, porque era la primera vez que veíamos una persona que no era elfa. Nuestro padre estaba furioso, ante tan grande desprecio de las tradiciones, despotricó durante semanas e intentó que lo echaran de la ciudad. En estos tiempos en cambio es más fácil ver humanos o enanos, nuestra tierra no está tan cerrada como antes y nuestro padre lo lamenta profundamente pero ya no está furioso, ha aceptado que el exilio es nuestra única salida mucho mejor que yo. No sé qué habrá visto durante sus embajadas a Ergoth, no he conseguido que me lo cuente. Ya lo conoces, ordena pero no explica.

Yo estoy inquieto. Nunca he salido de Qualinesti. Espero que las cosas vengan a mí en vez de ir a por ella, o dejo que tú adivines mis pensamientos y me arrastres. Y ahora parto para el exilio y todo mi mundo tiembla, siento incertidumbre y nerviosismo. Entonces miro a mi alrededor y veo a la gente con mucho más miedo del que yo soy capaz de sentir. Así que intento sonreír y darles esperanzas, si me ven tranquilo se tranquilizan aunque realmente no sea yo el que lo consiga, sino el medallón de nuestra casa que brilla en mi cuello. Si el hijo del Senador Rashas está tranquilo es que todo va bien. Sé que eso es lo que piensan, lo veo. Y me alegra porque verlos nerviosos me pone a mi más nervioso de lo que estoy.

Te veré esta noche antes de partir, pero con la boda no creo que podamos hablar. Me hubiera gustado una ceremonia más impresionante, un banquete de tres días. Es lo apropiado. Los tiempos difíciles no nos dejan hacer lo apropiado pero si nuestro padre está de acuerdo no voy a ser yo quien se oponga a ello. Y sé que es lo que deseas. Espero que nuestra separación sea breve y podamos pronto regresar a Qualinost.

Tu hermano

Dhariil
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En el exilio

Carta de Dhariil Rashas a su hermana Dharashana
Querida hermana:

Espero que esta misiva te llegue, los rumores que nos llegan del bosque nos hablan de momentos duros y de dificultades. Me hubiera gustado que regresaras con Palthainon, pero supongo que tu labor en los bosques es más importante. Espero que no haya pasado nada entre vosotros que justifique la separación, nada que no sea una guerra cruel contra los que invaden nuestra patria. Apenas he hablado con él desde que ha vuelto, aunque ha venido varias veces a visitar a nuestro padre. Tengo la sensación de que evita mis miradas, tal vez porque le recuerdo a ti y te echa de menos. Espero que la próxima vez que venga pueda hablar un rato a solas con él.

Aquí los días pasan tranquilos y me he adaptado bien a la nueva vida de nuestro pueblo. En realidad no es tan distinta. Cuando llegamos los kalanestis nos habían preparado un asentamiento semisalvaje, pero nuestro padre está dirigiendo los trabajos que harán de Qualimori una ciudad aceptable. Los silvanestis también han creado una ciudad en Ergoth, su país está siendo devastado por una pesadilla y también han decidido huir al exilio. Como nosotros. A veces me pregunto si las cosas hubieran salido mejor si los elfos no huyéramos y nos esforzáramos en luchar, otras veces creo que las cosas pasan porque tienen que pasar y que es mejor no luchar contra los acontecimientos.

Leo mucho estos días, me ocupé yo de desempacar los libros y estoy leyendo muchas historias antiguas. Es interesante ver de dónde vienen nuestras tradiciones y cómo hubo un tiempo en que los elfos éramos los elegidos de los dioses. También hay algunos libros sobre las guerras de kinslayer pero las batallas siempre me han interesado menos, tú lo sabes.

A veces echo de menos los bosques de Qualinesti. Ergoth es más salvaje, más intenso, aunque las cosas no estén saliendo como esperábamos. No tener noticias vuestras es lo que más nos preocupa, y no saber cuándo podré enviarte esta carta, ni siquiera si te llegará. He visto a alguno de nuestros primos silvanestis. Nuestro padre ahora es el senescal y se ocupa de todo el gobierno de Qualimori, tiene que recibirlos y acudir a sus invitaciones. A veces lo he acompañado, tenía mucha curiosidad por verlos en su ambiente. Presumimos de diferenciarnos con ellos pero creo que en el fondo nos parecemos más de lo que nos gustaría. Los he observado con interés y los cortesanos no son muy distintos de los nuestros. He hecho en cambio amistad con dos de mis sirvientes kalanestis. Son de la región y es la primera vez que traban contacto con nosotros. Hasta ahora han vivido en el bosque, algunos kalanestis se quejan de tener que servirnos y nos acusan de esclavizarlos. Nosotros los tratamos mucho mejor de lo que los tratan los Silvanestis, pero entiendo que se están enfrentando a una nueva forma de vida que no entienden. Si fuera algo incorrecto nuestro padre ya habría tomado medidas pero no hay nada incorrecto en enseñarles cómo es la civilización y las costumbres correctas.

Saskara nunca se ha quejado, ella es silenciosa y tímida y mira siempre a todo el mundo con respeto, se está cuestionando si sus creencias son mejores que las nuestras, aunque nunca estoy seguro de qué es lo que realmente piensa porque he tratado muy poco con kalanestis Cuando yo empecé a hacerles preguntas sobre su forma de vida, ella empezó a hacerme preguntas sobre la nuestra. Su hijo, Kenkia, es apenas un adolescente y aunque también nos sirve con respeto se marcha al bosque cada vez que tiene ocasión. Me ha dejado acompañarlo un par de veces y me ha contado lo que sintió cuando vio a su padre, que había muerto en un desgraciado accidente de caza, descender por el rio en la barca ritual. Algo dentro de mi piensa que eso n estaba bien, que era una salvajada tratar así a los muertos, pero por otra parte quería comprenderle y compartir su dolor.

A nuestro padre no le gusta que salga a los bosques con los kalanestis, no es propio del hijo del Senescal de los qualinestis, tampoco le gusta que ande entre la gente del pueblo escuchándolos en vez de pasear entre los salones de las casas nobles de la ciudad. He vivido toda mi vida en los salones de la gente importante, los conozco a todos, no hay misterios ni secretos como sí encuentro entre la gente del pueblo. Otras vidas, otras expectativas, ver cómo lo importante para unos no cuenta para los otros. No creas que quiero cambiar, no es esa mi intención. Somos un pueblo estático y me considero estático yo también. Solo es el placer de conocer lo que es diferente.

Nuestra madre te manda recuerdos, te escribió una carta hace unos días pero no sabemos si te ha llegado. Quiere que me case, pero nuestro padre es partidario de esperar. Ninguna candidata le satisface y yo prefiero ser prudente y no hacer nada que pueda molestarle. Que yo no esté enamorado no parece importarle a nadie y es normal. Soy una pieza política, nada más. Tú has tenido suerte al poder casarte con quien has elegido, aunque yo creo que fuiste impulsiva como siempre, y que habría sido mejor esperar.

Esta noche tendremos otra fiesta. Me siento incómodo en esas reuniones porque todos se comportan como si estuviéramos en Qualinost y nada hubiera cambiado. Es también interesante observarlos, ver cómo niegan la realidad, pero a veces me hastía y me escapo al bosque con Kenkia y Saskara, parece más interesante conocer el significado de los tatuajes que llevan que fingir una conversación con alguien que sólo me habla del pasado. Kenkia dice que las jóvenes qualinestis son muy hermosas.

Sigo viendo también a Therphas y Kalisthos, nuestros primos también celebran reuniones y montan juegos. Hablan de volver y reconquistar Qualinesti, de dar respuestas contundentes pero se quedan ahí. En su momento votaron por el exilio y ahora desde aquí dan discursos grandilocuentes, cuando ya no sirven para nada. Todos fingimos que no somos cobardes por habernos marchado pero lo cierto es que la gran mayoría sí lo somos. Los miro y veo cobardía, me miro a mí mismo y me digo que es reserva y precaución. En el fondo todo es lo mismo. A veces creo que nuestra madre tiene razón y que pienso demasiado las cosas, pero es difícil tomar decisiones si no las piensas bien primero, aunque nunca podamos tener la certeza de que acertemos.

Pues déjate llevar, por una vez. Es lo que me dirías. Casi oigo tu voz diciéndomelo. Espero que estés bien, hermana, y que nosotros seamos merecedores de los esfuerzos que estás haciendo. Sé que estás viva y que luchas. Nuestro padre a veces parece pensar que has muerto, él piensa que tendríais que haber vuelto, que el puesto del Orador está aquí con su pueblo. Sin embargo él gobierna nuestro pueblo lo mejor que puede en su ausencia y la gente le respeta y lo aprecia. No tenéis que preocuparos que nosotros estamos bien.

Espero que puedas conseguir enviarnos noticias uno de estos días, las esperamos con impaciencia.

Tu hermano.

Dhariil.

3 comentarios:

  1. muy bonito e interesante tu trasfondo, la cuestion es ¿que clase sera el pjs? y ¿como es ese Dragonlance alternativo?

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  2. Será un clérigo de Majere, al principio pensé hacerlo noble/clérigo pero al final hice la ficha como clérigo aunque no use los conjuros hasta que lo sea, pero para no perder la progresión.

    Cambia con la guerra de la lanza en que aquí Takhisis ha vencido y domina Ansalon, nosotros los elfos estamos todavía en Ergoth y mi padre (Rashas, sí, el que sale en Gilthas :p) quiere fundar un superreino elfo allí. Los dioses del bien hay quien piensa que han muerto o que nunca exisitieron y que solo existen los dioses del mal. Yo tendré la oportunidad de encontrarlos y traerlos al mundo, como Goldmoon :D

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  3. Wow que bien, aunque no he leido Gilthas Orador de Soles, asi que no se que tanto peso tiene tu padre, pero t ha quedado un excelente personaje XD

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