sábado, 30 de enero de 2010

[Reseña] Intrigas y deseos

Nunca me ha gustado demasiado Dalgliesh. Me resulta demasiado lejano, demasiado frío. No es un personaje con el que pueda sentirme identificada y tampoco llega a resultarme odioso, P.D. James construye un personaje que en todas las novelas en las que lo he visto ha conseguido dejarme indiferente.

Lo mismo me pasa muchas veces con sus novelas. Son correctas, pero no me terminan de llegar. La trama está bien construida, pero no termina de interesarme. En Intrigas y Deseos se intuye fácilmente quien es el asesino a mitad de la novela, en otras  que he leído está más disimulado pero aquí brilla abiertamente. También desde las primeras páginas sabemos quién va a ser la víctima, todo está mostrado de forma tan abierta que por un momento pensé que podía haber algo más, que daría algún giro que me sorprendería. No ha sido así, la trama da vueltas para llegar a donde estaba previsto.


Venus - Chasseriau

A diferencia de otras novelas de P.D. James, aquí Dalgliesh no es el protagonista. Tiene tan poco peso que me pregunto porqué está ahi ¿porqué no lo ha suprimido? Podría haberlo hecho y no se hubiera notado.  El otro detective, Rickards tampoco tiene mucha importancia. No hay grandes protagonistas ni entre los investigadores ni entre los sospechosos, todos tienen su lugar en el puzzle, un lugar preciso y concreto del que no salen.

Quizás el verdadero protagonista del libro sea la casualidad y los malentendidos. No entendí la importancia de un vaso mellado, la amplia descripción que le dedica, hasta que no vi que era la causa de una mala interpretación. La policia saca conclusiones erróneas de sucesos casuales, también lo hacen los sospechosos. Lo más interesante del libro es ver cómo las personas actúan de forma equivocada porque interpretan mal los mensajes que les llegan. Hay personajes que mueren por un error, una muerte extraña y ajena a la trama principal pero que cobra gran interés a pesar de ser una trama secundaria, posiblemente sea el momento más intenso del libro, sin embargo los personajes que llegan a ese momento intenso apenas han sido tratados, los hemos visto de refilón, sospechosos de relleno.

Se nota en el libro la falta de un protagonista que arrastre la historia, de personajes atractivos que atrapen al lector. Hay personajes que parece que van a dar mucho de sí y se quedan en anécdota, otros en cambio parecen personajes de relleno y acaban adquiriendo más importancia. A la trama le falta vigor, intensidad, está muy bien construida, no hay fallos de coherencia, pero le falta algo que nos lleve a querer pasar de página y a no soltar el libro hasta que hayamos descubierto qué es lo que está ocurriendo. Intrigas y deseos es una novela correcta, pero nada más.



Molino - Carlos de Haes

No hay comentarios:

Publicar un comentario