La palabra era "unido"
Clima controlado
Cuando salía, siempre llevaba un paraguas colgado del brazo. El cielo era azul y nadie sabía para qué servía.
Llegó un día y la cúpula que los protegía se resquebrajó. Mientras la
lluvia lo empapaba, se acercó a uno de sus vecinos y le ofreció el
paraguas.
La palabra era "unido"
Siameses
Giró la cabeza y no vio el rostro de su hermano. Se sintió solo por primera vez.
La palabra era "cariño"
Un día más
Llegó a casa. Buscó las zapatillas debajo de la cama. Solo encontró
una. Calentó la comida en el microondas. Se sentó frente al televisor.
El gato se acurrucó en su regazo mordisqueando un trozo de tela a
cuadros. Lo acarició.
La palabra era "olvidé"
Primera vez
Entró en la habitación que no recordaba. Buscó en la estantería un
libro. Páginas ajadas, notas subrayadas en los márgenes. Una letra que
no reconocía. Se sentó en el viejo sofá, se adaptaba a su cuerpo, como
si lo conociera.
Empezó a leer.
Empezó a leer.
La palabra es "sé"
En serie
Sé que nos encontraremos algún día. Sé que pasaremos el uno junto al otro. Nos miraremos. Sé que apartarás la cabeza y fingirás no reconocerme y yo no sabré si hablarte.
Sé que te alejarás. Sé que volveré a matarte.
Sé que nos encontraremos algún día. Sé que pasaremos el uno junto al otro. Nos miraremos. Sé que apartarás la cabeza y fingirás no reconocerme y yo no sabré si hablarte.
Sé que te alejarás. Sé que volveré a matarte.
La palabra era "cadáver"
El otro
Aparece la herida, un círculo oscuro en medio del pecho. El dolor es agudo, te desplomas. Y suplicas, extiendes la mano crispada antes de cerrar los ojos. Frente a ti, el cadáver se pone en pie y te mira. Se toca el pecho, la bala. Se aleja.
Aparece la herida, un círculo oscuro en medio del pecho. El dolor es agudo, te desplomas. Y suplicas, extiendes la mano crispada antes de cerrar los ojos. Frente a ti, el cadáver se pone en pie y te mira. Se toca el pecho, la bala. Se aleja.
La palabra era "hogar"
Despedida
Los muebles se retuercen, las cortinas han ardido. Las llamas tiñen
las paredes de negro. El humo lo hace llorar. Sí… es el humo. Con la
cerilla consumida en la mano, cierra la puerta al salir. No podrá
volver.
Ahora solo tiene futuro.
Y con este último me despedí en la sortija, quedan los micros de la final. Los pondré en un post aparte en un par de días.
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