miércoles, 19 de enero de 2011

El miedo a que me lean

Puede parecer paradójico tener miedo a que te lean y al mismo tiempo tener un blog donde voy colgando lo que escribo.

William comenta en su blog (aparte de subirme monstruosamente el ego) lo que le cuesta mostrar sus relatos. Coincido con él en algunas cosas, como en que no me gusta enseñar nada hasta que está terminado, no me gusta que se vea el proceso de creación, odio enseñar fragmentos o cosas a medias, no soporto cuando estoy escribiendo y alguien se acerca e intenta mirar por encima del hombro, entonces tapo la hoja... y no porque sea realmente nada importante, sino porque no es lo que quiero que se lea, es sólo un germen que puede que sea muy distinto de cómo será el relato al final.

La primera vez que hice un ejercicio de escritura automática en el Multiverso esto fue lo más difícil. No escribirlo, eso fue fácil, empiezas y dejas que las palabras salgan solas, sin preocuparte mucho de si tienen sentido... pero luego había que mostrar lo que había hecho. Allí podía estar el germen de un relato pero no estaba el relato en sí, era algo a medias, incompleto, quizás sólo ideas sueltas. Fue un momento de pánico total que se fue repitiendo en todos los talleres que he participado, no dejo que el miedo me impida participar en ellos, pero tampoco puedo quitármelo de encima.

Recuerdo el primer relato que colgué en internet, un fanfic que escribí y que colgué en la página El Orbe de los Dragones, era la primera vez que mostraba algo así en público, que gente desconocida iba a leerlo, deseaba mostrar el relato al mismo tiempo que temía el posible aluvión de críticas negativas que podía llegar. ¿Y si no le gustaba a nadie? Tuve suerte y el relato gustó, escribí más, gustaron, pero el miedo sigue ahí, en realidad, cada vez es peor.

Al principio no me conocía nadie, el que llegaba a mi relato lo hacía simplemente probando a ver qué encontraba, ahora sí me conoce la gente, tengo buena fama, dicen que escribo bien.... esperan un nivel que quizás no siempre pueda dar. Supongo que en parte es temor a decepcionar a los que esperan mucho de mí.

En el Multiverso solemos intercambiarnos los relatos para corregirlos,  y eso también me cuesta, aunque ya es mostrar el relato terminado, tal y como quiero que sea. A veces me gusta lo que hago, otra veces no, cuando no me gusta no temo a las críticas, estoy preparada para ellas y las agradezco pero cuando me gusta el resultado siento un miedo espantoso a que los demás no vean el relato como lo veo yo, a no haber conseguido transmitir lo que quería, aunque para mí el resultado sea perfecto. Varía tanto la percepción de un escritor de la del público (eso daría para otra entrada). Si algo he aprendido este último año es que soy incapaz de juzgar mi propia obra.

Y llegamos a la novela. El año pasado empecé a escribir una novela, en mayo hice el primer borrador, el junio la reescribí... y la dejé reposar, ha estado reposando desde entonces, poco antes de navidades me decidí a retomarla y lo que hice fue ponerme a reescribirla otra vez. Tengo claro que hay partes que debo cambiar, detalles que arreglar y que el final es horrible pero ¿es necesario reescribirlo todo? Cuando hablo de reescribir me refiero a palabra por palabra, hay momentos en los que veo que no estoy cambiando nada, que simplemente copio lo que ya escribí, y ni siquiera tengo claro que esté bien. ¿Y porqué lo hago? Quizás sea el mismo miedo. En el momento en que la termine tendré que hacer algo con ella, pedirle a alguien que la lea. Me da pánico ese momento y creo que lo estoy alargando todo lo puedo, mientras no la termine no tengo que pedirle a nadie que la lea. 

Y aquí es cuando vosotros, los que leéis este blog, intentaréis animarme y quitarme las tonterías de encima, pero lo cierto es que ser capaz de escribir algo no significa que ese algo sea bueno, y cada vez tengo más claro que lo que me da miedo no es el fracaso, o las críticas, lo que me da miedo es decepcionaros. 

 Pero no podemos dejar que el miedo nos paralice, aunque lo tengamos siempre dando vueltas a nuestro alrededor.

14 comentarios:

  1. Todos tenemos ese miedo, creo que es uno de los miedos, junto con el de la pagina en blanco mas persistentes en el escritor, sin hablar de las laguna literarias derivadas de la pagina en blanco.

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  2. Yo estoy 1000% de acuerdo contigo. Especialmente en el hecho de que me lean cuando estoy escribiendo ya sea en papel o en el ordenador, siento que se van a burlar de mi persona. Por otro lado a mi no me da miedo a quedarme en blanco, me da mucho más miedo no ser original o que me digan, estas haciendo lo mismo que X o tu trabajo tiene esta pifia y esta otra.

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  3. Si, lo de que se te acerquen a cotillear lo que haces es horrible, Will, creo que no hay nada peor que eso.

    A la página en blanco no le tengo miedo, como tampoco es que me dedique a escribir, que esto es una afición, si un día no sale nada pues me pongo a hacer otra cosa. A no ser original tampoco, si no soy original pero estoy contando lo que quiero, me parece que eso es lo importante. Lo de las pifias sí me preocupa más, por eso repaso tanto los relatos.

    ¡Gracias por pasaros y comentar!

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  4. ¡Hola amiguita!

    Mil gracias por compartirnos tu sentir respecto a esto que a todos nos pasa. Fíjate que a mí tampoco me gusta compartir mi trabajo antes de terminarlo pero como estoy muy conciente de que mis debilidades más grandes son de redacción, pues tengo que hacerlo para vida de publicar algo coherente con lo que pretendo decir. El detalle con el que me encuentro es que hay muy pocas personas con el conocimiento y la disponibilidad de leer mis trabajos y hacerles una crítica objetiva. Muy agradecida estoy porque muchas personas dicen que lo hago bien, pero tú y yo sabemos que nos sirve más cuando nos dicen lo que no está bien para trabajarlo.

    Por cierto, tú que sabes sobre los temas que escribo, ¿me podrías después recomnedar a alguien a quien le pudiera pedir que me leyera para que me retroalimentara? Tengo por ahí un par de amigas que lo hacen, pero me gustaría ampliar ese círculo. Alguna vez pensé en ti pero también sé que sueles estar muy ocupada y por eso no te lo he pedido, ahora que si en algún momento pudieras, no dudes en decirme.

    Bueno amiga, ya me extendí. Me da mucho gusto leerte. Cuídate mucho, te mando un beso enorme.

    ¡Mil gracias por todo!

    Besos.

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  5. ¡Serás petarda! Mandame lo que quieras, que para leer siempre hago hueco ;)

    Yo visito ahora este foro: http://www.elmultiverso.com/

    A la gente le va más la literatura de género (cifi,terror, etc) pero solemos intercambiar relatos y siempre hay alguien que se anima a leer. ¡Vente!!

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  6. Yo empecé hace tiempo un blog, precisamente con la idea principal (aunque no única)de que me leyera gente de fuera de mi entorno directo, y me señalara mis puntos fuertes y sobre todo los débiles para así poder mejorar gracias a esta sinergia.
    Es curioso, no obstante, que obtengo más comentarios con una reseña que con un relato, pero bueno, aun con todo no lo considero un mal sistema.

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  7. A mi me suelen comentar más cuando me pongo a divagar que cuando cuelgo relatos, creo que en general no interesan mucho los relatos. De todas formas casi siempre los que me comentan son conocidos, no creo que un blog te permita encontrar mucha gente de fuera de tu entorno.

    ¡Gracias por pasarte!

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  8. Hola

    Mi nombre es Tania y soy administradora de un directorio de webs/blogs. Me ha gustado mucho tu blog. Quisiera intercambiar enlaces. Puedo agregar tu blog en mi directorio para que así mis visitantes puedan visitarlo tambien.

    Si te interesa, escribeme al mail:
    tajuancha@gmail.com

    Exitos
    Tania

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  9. En efecto, Raelana, los comentarios de los blogs no suelen tener la dirección que más desea el bloguero, pero alguno suele atinar, y el resto le proporcionan a uno, como mínimo, la agradable sensación de ser leído, que no está nada mal. El miedo a ser leído es importante, pero ¿y el miedo a no serlo?

    Y no me agradezcas pasarme, ¡yo te agradezco estar por aquí para que me pase! :)

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  10. Gracias Tania, pero los enlaces que tengo son de amigos/blogs que visito, lo de intercambiar no le veo mucho sentido, si alguien me quiere enlazar puede hacerlo, pero que sea porque realmente le apetece no por un intercambio.

    Pedro, lo del miedo a no ser leído la verdad es que da para otra entrada xDDDD La verdad es que sí, muchas veces no importa que el comentario no sea lo que buscamos al colgar la entrada, simplemente ver que lo que has escrito le ha interesado a alguien ya es algo estupendo :D

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  11. Pues yo debo de ser rara. No tengo el más mínimo inconveniente a que lean algo que estoy escribiendo, aunque todavía diste mucho de estar terminado. Supongo que viene de lejos, de aquellas sesiones de escritura conjunta con Iona en las que ambas nos íbamos turnando a la hora de escribir, frente a frente en la misma mesa. Luego sólo había que pulir las diferencias de estilo y... voilà! Casi todo de lo que hay escrito de "El dragón y la espada" está hecho así.

    No sé, yo dependo mucho de la retroalimentación y de las ideas que otros me dan sobre la marcha (mi punto débil siempre son las ideas, hay que reconocerlo). Las críticas tampoco me dan miedo, no creo que haya nadie más crítica que yo con mi propio trabajo, que si por mí fuese estaría en una interminable revisión de escritos y nunca llegaría a darlo por terminado :p

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  12. ¡Qué suerte! Yo a veces me pongo a escribir en el trabajo y si se me acerca alguien ¡qué mal! Y eso que la letra ni se entiende, pero realmente lo paso mal.

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  13. No sé si es porque soy un inconsciente de manual, o porque tengo un ego desmedido, pero jamás me ha dado ninguna vergüenza que lean nada mío. Ni durante el proceso de escritura, ni tras mil y una reescrituras. Es más, suelo tener una seguridad apabullante en cuanto a que lo que escribo va a gustar.

    La verdad, a fuer de ser sinceros y a riesgo de que se me malinterprete, es que me suele importar una higa la opinión de mis posibles lectores. Como a todo juntaletras me gusta que me lean, me encantan los halagos, e intento encajar las críticas con la mayor dignidad. Procuro separar las destructivas de las constructivas para seguir mejorando. De todo se aprende, o eso creo. Además, al igual que Leydhen mi crítico más feroz y exigente soy yo mismo, así que apañado voy. Ahora bien, si no me lee nadie tampoco me siento especialmente mal. Escribo porque disfruto haciéndolo, y punto.

    No obstante mi miedo escénico es el de la página en blanco. De un tiempo a esta parte en las contadas ocasiones que tengo un hueco para sentarme frente a la pantalla (si se vendiese el tiempo yo ya estaba hipotecado hasta las orejas) me suelo quedar mirándola un rato largo para acabar leyendo la prensa por Internet. Una falta preocupante de ideas es la mía, y una pereza asombrosa para ponerme a trabajar a la fuerza para así llamar a la inspiración. Estoy planteándome seriamente el volver a escribir a la antigua usanza, con boli y cuaderno para después transcribirlo al ordenador. Sé que es un auténtico coñazo, pero lo mismo así logro arrancar. Pero no solo es esto último, y vuelvo a coincidir con Leydhen cuando digo eso de que necesito estímulos externos, “empujones” que me permitan arrancar. Me funciona la retroalimentación como ninguna otra cosa. A nivel de narrativa fantástica mi época más productiva fue la de Sombras, en la desparecida N&Q, cuando la colaboración de Pirotesse me empujaba a escribir sin parar.

    En lo que a ti respecta Rae, no deberías tener jamás ningún miedo a que nadie te lea. Sabes que escribes bien. Muy bien, Tienes un estilo ya muy definido, y tienes las suficientes tablas como para enfrentarte con seguridad a ese morlaco que son los lectores. Por mi parte no puedo sino conminarte a que dejes de lado cualquiera duda que te atenace. Si a eso le sumamos que no tienes ese miedo a la hoja en blanco…cachis señorita, que envidia me da usted.

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  14. A mi me da envidia tu ego, si es que la inseguridad viene de serie, no es algo que pueda controlar. :(

    Yo el 90% de lo que escribo lo hago a mano, lo cual suele ser un problema porque luego no entiendo mi letra, el primer borrador a mano y ya las reescrituras las hago a ordenador. Como estímulo te recomiendo que pruebes la escritura automática, que hice un par de talleres el año pasado, una forma era coger tres palabras al azar y montar un relato con ellas, otra era coger una frase y empezar a escribir a partir de ahí. Lo que te sale normalmente no es gran cosa, pero suele haber ideas que luego puedes reaprovechar.

    La retroalimentación es cierto que es lo que más motiva a escribir, lástima que no llegaráis a terminar Sombras, mira que me enganchó esa novela.

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