lunes, 2 de diciembre de 2013

Presentando a Guadalupe Eichelbaum

Ya os comenté que iba a presentar a mi amiga Guadalupe Eichelbaum en las jornadas Mejor con un libro. Ella había organizado un cuentacuentos en el que iba a leer "La giganta tragamontañas" y después había organizado un juego para los niños. Eso fue la semana pasada. Sí, al día siguiente del 50 aniversario de Doctor Who, ¿por qué esto es importante? Porque me fui a Marbella al cine que está como a... muy lejos, vamos, y llegué a casa a las cuatro y media de la mañana. Y al día siguiente me levanté a las nueve para ir a las jornadas. O bueno, para arrastrarme hasta ellas, mejor dicho.

El cuentacuentos empezaba a las once y yo llegué puntual, o casi, con mis pintas de tener resaca (pero no bebí nada, era de no dormir y del cansancio del día anterior). Guadalupe me esperaba en la puerta y yo creo que llegó a pensar que no aparecería, pero no iba a dejarla sola con los monstr... digo.. los niños. Así que me acerco a ella, vamos a entrar y le suelto: "Bueno ¿y cómo te presento? Porque en esto de presentar soy novata y no sé". La mirada que me echó Guadalupe fue de auténtico pavor, por un lado parecía dudar un: "¿pero me lo está preguntando en serio? No, está bromeando" por otro lado, estaba segura: "Es Rae, habla en serio, la mato". Afortunadamente para mí tuvo que entrar al baño y yo me escabullí hacia la sala donde ya había algunos niños, todo el mundo parece tímido en las presentaciones y se sientan detrás, yo me puse en plan mandona y les solté: "Venga, todos los niños para'lante" y ante mi asombro las madres me hicieron caso y sentaron a los niños en primera fila. Guadalupe estaba un poco nerviosa. Yo también, pero huir requería mucho esfuerzo y no estaba yo para salir corriendo así que nos sentamos a la mesa y comenzó la presentación: ¡La Giganta Tragamontañas!

Aquí con el cuento, edición especial para las jornadas literarias

Empiezo presentando a Guadalupe y pensando que debería hacerle alguna pregunta, miro el cuento y me lanzo: 

-¿Y por qué escogiste como protagonista a una giganta? -yo en plan muy profesional.

-En realidad lo que yo quería contar es porqué la giganta es tragamontañas -respuesta de Guadalupe, o cómo el entrevistado se dedica a trollear al entrevistador.

Lo sabía, ya había metido la pata. Y como soy una bocazas, lo digo.

-¿Lo ves? Mira que te he dicho que qué hacía para presentarte, ya la he fastidiado. Si es que no sé cómo me dejáis presentar.

Guadalupe se parte de risa mientras los niños no se enteran de nada, como la gran profesional que no soy, intento reconducir la charla.

-Bien, explicanos por qué la giganta tragamontañas.

Ahora que lo pienso no sé si debería mencionar su respuesta... así se lo preguntáis en su próxima presentación.

Le hice un par de preguntas más, ya sin meteduras de pata, bueno, hice spolier de la primera línea del relato, ¡pero de nada más, de verdad! De pronto veo que los niños se están distrayendo, dudo si seguir hablando y decido que no, pasamos entonces a leer el relato.

Guadalupe explicando por qué la giganta tragaba montañas.

Los niños se estaban portando muy bien, alguno preguntó por el juego que haríamos después, pero durante la lectura no interrumpieron y al terminar repartimos los ejemplares. El cuento está ilustrado con dibujos de la propia Guadalupe y nos contó que tiene escritas más aventuras de la Giganta Tragamontañas.

Pasamos entonces al juego, los niños estaban muy entusiasmados y los mayores un poco desconcertados porque se les pidió que colaboraran. Teníamos que hacer de montaña, hicimos dos filas, juntamos las manos y la idea era que los niños pasaran por debajo, se fueran comiendo la montaña y nosotros entonces bajábamos. 

Sí, como cuando hacíamos sentadillas en gimnasia. 

Cada vez que pasaba un niño. Y cada niño pasó más de una vez. 

Luego descubrieron que no tenían que pasar solos, que la giganta podía tener piojos y empezaron a pasar en grupo, la Giganta y los piojos.

Luego una madre les sugirió que la giganta tenía que comer, y que nos hicieran cosquillas mientras pasaban (como si no se les ocurrieran suficientes ideas a ellos solos, ains).

Pero aguantamos el tipo, yo hice ejercicio para todo el mes y nos reimos todos mucho. Los niños se lo pasaron en grande, los adultos quisieron escaquearse aunque yo creo que en el fondo también les gustó y sé que Guadalupe, la próxima vez que le diga de presentarla me dirá: "No hace falta, Rae, mejor no", pero con mucho cariño. 

 El niño que hacía de Giganta se poniá una peluca

 ¡Se comió toda la montaña!

Al final los adultos también se animaron a jugar, la primera, la autora del cuento.



5 comentarios:

  1. ¡Que grande lo que hacéis, que grande!
    Sois gigantas generabuenosmomentos. ¡Felicidades!

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  2. Me ha encantado. Qué bonito. Con sueño y todo, pero ahí estuviste ejerciendo de superpresentadora.
    Un besote.

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  3. La verdad es que lo pasamos muy bien y Guadalupe me ha dicho que sí me pedirá alguna que otra vez que la presente, yo creo que le he dado pena xDDDDD

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  4. Muy orgullosa de mi prima!! Su libro le encantó a mi hijo de 7 años!!!

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  5. Lo anterior lo escribí yo ;)

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